lunes, 30 de marzo de 2009

TESTIMONIO PODEROSO


Mc 7,37

Llenos de asombro, decían: –Todo lo hace bien. ¡Hasta hace oir a los sordos y hablar a los mudos!

En el día de ayer el Ministerio Kadosh, República Dominicana, estuvimos en el municipio de Azua de Compostela ministrando la Palabra de D'os y fue algo maravilloso, porque se sintió la misma presencia de D'os. Oramos por varios enfermos y podíamos ver cómo D'os obraba inmediatamente.
Un caso especial fue, que yo estaba orando por un joven, luego calló al piso (algo normal, que siempre sucede), me quedé un momento observándolo y el Señor me dijo que continuara orando por el. Pongo mis dedos en sus oidos y declaro que estos se destapan y recibe poder de D'os. Luego me levanto del piso y pregunto a una hermana que estaba alli mirando lo que acontecia, cuál es el nombre de este joven? Ella me repondió diciendome el nombre y agregó: "pero es sordomudo", a lo que yo repondí: pues ya no es sordo y dentro de poco dejará de ser mudo. Puse mis manos en su garganta y ordené al espíritu mudo que abra su boca y salga inmediatamente.
El espiritu mudo abrió la boca del joven y este comenzó a escupir, pero no escupia saliva sino que escupia sangre, mucha sangre. Yo continué ordenando al espiritu mudo y atodos los que habían entrado con el, que salieran y dejaran a este joven limpio, porque ahora es morada del Espiritu Santo. Cuando dejó de escupir sangre, bomitó una flema amarillenta, la cual también salía por su nariz. Cuando ya escupia saliva normal, me dí cuenta de que ya había salido todo. Entonces ordené en el Nombre de Jesús que su lengua le fuera desatada. Llamé al joven por su nombre y le pedí que dijera aleluya. En el momento sólo abria la boca para decirlo pero no salia su voz. Lo deje un momento y cuando recuperó la conciencia se levantó y se sentó en el piso, entonces me acerqué a el, llamándolo por su nombre le dije que me mirara, tenia los ojos sumamente rojos, no habia visto unos ojos tan rojos. Entonces le dije que dijera "aleluya" y dijo "aleluya". Entonces se levantó y abrazó a los que estaban alli y todos glorificamos al Señor por este tan maravilloso milagro.

viernes, 27 de marzo de 2009

LAS SIETE PALABRAS DE JESUS EN LA CRUZ


1- PADRE, PERDONALOS PORQUE NO SABEN LO QUE HACEN. (Luc. 23:34)

El amor de Jesús hacia nosotros no se puede comparar con nada. Es increible cómo en tales circunstancias pudo pedir al Padre que perdonara a aquellos verdugos que acababan de crucificarlo. Cuando ya su cuerpo, totalmente desgarrado por los impiedantes golpes y latigasos que habia recibido, colgaba de aquella cruz. No habia fuerza en sus brazos, no habia fuerza en sus pies, tampoco en su cuello para sostener su cabeza. Llevaba todo el peso del pecado de la humanidad.
Siendo El inocente, ocupó el lugar que debí ocupar yo. Siendo El inocente, sufrió los latigazos que debí sufrir yo. Siendo El inocente, sufrió el rechazo de los hombres por los cual murió y todavia hay quienes lo continuan rechazando.

2- TE ASEGURO QUE HOY ESTARAS CONMIGO EN EL PARAISO. (Luc. 23:43)

Toda la gente que estaba alli presenciando el acontecimiento que marcó el mundo, gritaban a Jesús que descendiera de la cruz si realmente era el Hijo de Dios. Jesús podia descender de la cruz, pero la Palabra de Dios debia cumplirse.
Uno de los dos malechores que fueron crucificados con El tambien le gritaba que se salvara a sí mismo y los salvara a ellos, pero el otro lo reprendió diciendo que ese castigo era justo para ellos, no asi para Jesús que era inocente, y le pidió a Jesús que se acordara de él cuando esté en su reino, entonces fue cuando le dijo la segunda palabra: "Te aseguro que hoy estarás conmigo en el paraiso".

3- MUJER, HE AHI TU HIJO. HE AHI TU MADRE. (Jn. 19:26)

La humanidad de Jesús queda marcada con esta palabra en una forma viva. Cuanto amaba Jesús a su madre, que aun en la hora de su muerte y su agonia todavía se ocupa de ella, todavia la sigue protegiendo. Que momento tan dificil para María, ver a su hijo clavado en la cruz. Seguro que su llanto no encontraba consuelo aun cuando ella había dicho he qui la sierva del Senor. Admiro a esta gran mujer por su entrega a Dios. Cuántos de nosotros no estamos dispuesto a sacrificar ni si quiera una hora de nuestro tiempo por el Señor y aquí esta maravillosa mujer estuvo dispuesta a soportar aun el dolor de ver a su hijo morir en una cruz sin haber cometido falta alguna. Jesús sabe lo que es el dolor. El conoce lo que es el sufrimiento. Cuando tú te le acercas en oración por una madre, por un hijo, por un ser amado, El sabe por lo que estas pasando. El no te abandona ni te ignora. Justificado hubiera sido para Jesús concentrarse sólo en su dolor. Pero no lo hizo asi. Sino que sacó tiempo para ocuparse de su madre y de Juan. A Juan, el más joven de sus discipulos tampoco lo quería dejar sólo. Yo sé que Jesús oye mis oraciones. Yo sé que entiende mi dolor y estoy seguro que se ocupa de mí y no me deja sólo. Esta palabra me confirma que mis oraciones no se pierden en el aire. Esta palabra me anima a pasar tiempo con mi Salvador y me deja ver que el orar es una delicia, es un milagro extraordinario del cual Dios me hace participe.

4- "DIOS MIO, DIOS MIO, POR QUE ME HAS DESAMPARADO?" (Mc. 15:34)

Muchas veces me pregunté, ¿ por qué Dios abandono a su hijo cuando más lo necesitaba? Cuando la gente oyó a Jesús decir estas palabras, pensarian que estaba pidiendole ayuda a Jehova. O tal vez los eruditos, los estudiantes de las Sagradas Escrituras, pensarian que estaba recitando el salmo 22. Asi también puede ser que muchos hoy dia al leer estas palabras sólo lo tomen como una señal del dolor que Cristo pasó. Pero es mucho más que una simple señal de su dolor. La Biblia nos dice en Mateo 27:45:
"Y desde la hora sexta hubo tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora novena".
La hora sexta es el medio dia para nosotros y la hora novena son las tres de la tarde. Este es el tiempo cuando más fuerte brilla el sol. Pero aquel viernes fue diferente. Todas las tinieblas del infierno se levantaron en contra de Jesús, todo el pecado del mundo fue puesto sobre él. El que nunca habia conocido pecado se hizo pecado por nuestra culpa.
2 Corintios 5:21 "Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.
Tu pecado y el mío fueron sobre él. Tú y yo debimos de haber muerto en aquella cruz, no Jesús, pero él tomó nuestro lugar. El Espíritu de Dios se tuvo que separar de Cristo para que el pecado se pudiera venir sobre él, y asi quizo el Senor que quedase constancia de tan gran sacrificio y de tan gran momento cuando él toma nuestro lugar! ¿Dios mio, Dios mio, por qué me has desamparado? Aqui no queda duda, el mismo Espiritu Santo se habia separado de él, Jesús Hombre vencía el pecado. No sólo sufrió nuestro Salvador la agonía física pero también tuvo que sufrir la agonía espiritual.

5- TENGO SED. ( Jn. 19:28)

Aun hasta el día de hoy, hay poder en la sangre que Cristo derramó. La palabra tengo sed refleja que ya casi no quedaba líquido en su cuerpo. Daba hasta la última gota de su sangre por nosotros. Dice la palabra que aún en el final una espada traspasó su costado, y asi Dios lo permitió por si aun quedaba algo más que dar, así su hijo lo daba TODO.
Juan 19:34 "Pero uno de los soldados le abrió el costado con una lanza, y al instante salió sangre y agua.
Cuando el Senor te pide un sacrifico de tu parte para él, ¿cómo se lo puedes negar? El lo dió todo por nosotros sin escatimar nada.
Romanos 8:32 "El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿como no nos dará también con él todas las cosas?
Senor, poco soy para servirte, pero en lo que Tú estimes que yo debo hacer, heme aquí mi rey. Cuando sirvamos a Dios, no lo hagamos por glória, ni prestigio, ni posiciones. Hagamoslo sólo por amor y agradecimiento. Al final, sólo él lo hace posible.

6- CONSUMADO ES. ( Jn. 19:30).

Consumado es. Consumado es. Consumado es. Quisiera decirlo mil veces. Cuando el Senor dijo estas palabras, se conmovió el universo completo. Todos los demonios del infierno supieron que estaban vencidos. La muerte habia sido destruida, la victoria era total!!! Nuestro Jesús venció!!! Nuestro Salvador ganó la batalla!!!

7- PADRE, EN TUS MANOS ENCOMIENDO MI ESPIRITU!. (Luc. 23:44)

La tierra se estremeció. Ni siquiera pudo contener a sus muertos!!!
Mateo 27:51 "Y he aquí, el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo; y la tierra tembló, y las rocas se partieron; 52 y se abrieron los sepulcros, y muchos cuerpos de santos que habian dormido, se levantaron; 53 y saliendo de los sepulcros, después de la resurrección de él, vinieron a la santa ciudad, y aparecieron a muchos. 54 El centurión, y los que estaban con él guardando a Jesús, visto el terremoto, y las cosas que habian sido hechas, temieron en gran manera, y dijeron: Verdaderamente este era Hijo de Dios".
El velo se rasgó porque ya se habia acabado la separación entre el hombre y Dios. Ahora ya yo no necesito que un sumo sacerdote interceda por mi, yo puedo venir por medio de Cristo directamente a mi Padre Celestial. Gloria a su nombre. Fíjate cómo el espíritu de Cristo va inmediatamente al Padre. Por eso le dijo al ladrón arrepentido, hoy estarás conmigo en el paraiso. Lo que muere es el cuerpo no el espiritu. Ahora sé que cuando muera, no estaré en una tumba fria, porque inmediatamente mi espiritu ira al Padre!
Gracias Padre por estas hermosas siete palabras.

jueves, 26 de marzo de 2009

LOS SIETE SELLOS DEL APOCALIPSIS

Con la firma del pacto de paz con Israel, empiezan los grandes juicios mundiales, los cuales Dios derrama sobre todos los seres humanos, los que se inician con los siete sellos, seguidos de las siete trompetas y finalizando con las siete copas de ira.

PRIMER SELLO.- Apocalipsis 6:1-2: "Vi cuando el Cordero abrió uno de los sellos, y oí a uno de los cuatro seres vivientes decir como con voz de trueno: Ven y mira. Y miré, y he aquí un caballo blanco; y el que lo montaba tenía un arco; Y le fue dada una corona, y salió venciendo, y para vencer".
Este sello habla del anticristo. El caballo blanco describe su filosofía humanista, pacifista de falsas esperanzas para el mundo entero. Hablará mentiras y el mundo le creerá, 2° de Tesalonicenses 2:8-10 "Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida; inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos".
El inicuo, el anticristo, será el personaje más importante de toda la tribulación, así como el más cruel y despiadado, aunque aparentará amor y piedad, y a muchos engañará. Hablará de humanismo y derechos humanos para engañar a los moradores de la tierra. El triunfo del anticristo será en todo: En política, la diplomacia, la economía, etcétera.
SEGUNDO SELLO.- Apocalipsis 6:3-4 "Cuando abrió el segundo sello, oí al segundo ser viviente, que decía: Ven y mira. Y salió otro caballo, bermejo; y al que lo montaba le fue dado poder de quitar de la tierra la paz, y que se matasen unos a otros; y se le dio una gran espada".
Millones de personas morirán por este juicio. Este jinete provocará guerras en casi todo el mundo, rumores de guerras, pleitos entre una nación y otra.
TERCER SELLLO.- Apocalipsis 6:5-6: "Cuando abrió el tercer sello, oí al tercer ser viviente que decía: Ven y mira. Y miré, y he aquí un caballo negro; y el que lo montaba tenía una balanza en la mano. Y oí una voz de en medio de los cuatro seres vivientes, que decían: Dos libras de trigo por un denario, y seis libras de cebada por un denario; pero no dañes el aceite y el vino".
Los alimentos serán racionados y caros. El salario de un día (un denario) sólo alcanzará para comprar un kilo de trigo y no más. La gente comerá un día y un poco de algo y otro día otro poco de otra cosa. El aceite estará al alcance de los ricos, principalmente de los seguidores de la bestia, así como el vino.
CUARTO SELLO.- Apocalipsis 6:7-8: "Cuando abrió el cuarto sello, oí la voz del cuarto ser viviente, que decía: Ven y mira. Miré, y he aquí un caballo amarillo, y el que lo montaba tenía por nombre muerte, y el Hades le seguía; y le fue dada potestad sobre la cuarta parte de la Tierra, para matar con espada, con hambre, con mortandad y con fieras de la Tierra".
La muerte y el Hades siempre van de la mano; una matando y el otro recibiendo las almas en el infierno. Este jinete acaba con la vida de la cuarta parte de la humanidad con hambre, espada, con mortandad y fieras. Las pestes y el hambre, son las armas de este jinete.
QUINTO SELLO.- Con este sello Dios nos revela que las personas que aceptaron a Cristo en la tribulación y murieron, están en el Cielo, bajo el altar, esperando que muchos otros mueran y se complete el numero de ellos. Apocalipsis 6:9-11: "Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por la causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. Y clamaban a gran voz, diciendo: ¿Hasta cuando, Señor Santo y verdadero, no juzgas y vengas nuestra sangre en los que moran en la tierra? Y se les dieron vestiduras blancas, y se les dijo que descansarán todavía un poco de tiempo, hasta que se completara el numero de sus consiervos y sus hermanos, que también habían de ser muertos como ellos".

Estas almas serán resucitadas al final de la tribulación que durará siete años. Ellos ya están viendo a Dios cara a cara, ya están disfrutando de la eternidad con el Señor. La alabanza que sale de sus corazones es de gratitud por la salvación y por el gozo de estar en el cielo. "Por causa de la Palabra", quiere decir por predicar la salvación en Cristo.
SEXTO SELLO.- Apocalipsis 6:12-17: "Miré cuando abrió el sexto sello, y he aquí hubo un gran terremoto, y el sol se puso negro como tela de cilicio, y la luna se volvió toda como sangre; y las estrellas del cielo cayeron sobre la tierra, como la higuera deja caer sus higos cuando es sacudida con un fuerte viento. Y el cielo se desvaneció como un pergamino que se enrolla; y todo monte y toda isla se removió de su lugar. Y los reyes de la tierra, y los grandes, los ricos, los capitanes, los poderosos, y todo siervo y todo libre, se escondieron en las cuevas y entre las peñas de los montes; decían a los montes y a las peñas: Caed sobre nosotros, y escóndenos del rostro de aquél que está sentado sobre el trono, y de la ira del Cordero; porque el gran día de su ira ha llegado; ¿Y quién podrá sostenerse en pie?".
Este juicio nos habla de un terremoto tan grande que provocará derrumbes y erupciones de volcanes, el polvo, la ceniza y el humo cubrirá la tierra de tal manera que casi no brillará el Sol y la luna se verá roja. "Los cielos serán conmovidos". Habrá lluvia de meteoritos cayendo a la tierra, las islas se removerán y los montes caerán, etc. En fin, este juicio será de los más terribles, pero aún así muchos seres humanos no se arrepentirán, aunque sabrán que es Dios quien está enviando estos juicios. Con este sello son seis los eventos contra la humanidad, como podemos observar si leemos.
Antes de abrir el séptimo sello, Dios nos regresa al principio de la tribulación, es decir, después del arrebatamiento, para hacernos ver que los ángeles que detienen los cuatro vientos de la Tierra, se esperarán hasta sellar a los siervos de Dios. Apocalipsis 7:1-3: "Después de esto vi a cuatro ángeles en pie sobre los cuatro ángulos de la tierra, que detenían a los cuatro vientos de la tierra, para que no soplase viento alguno sobre la tierra, ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol.
Vi también a otro ángel que subía de donde sale el sol, y tenía el sello del Dios vivo; y clamó a gran voz a los cuatro ángeles, a quienes les había dado el poder de hacer daño a la tierra y al mar, diciendo: No hagáis daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Dios".
En este momento sellarán a los 144,000 judíos por el mundo entero, ellos predicarán el evangelio por amor a Cristo, sin miedo a la muerte, porque Dios es poderoso para guardarlos, para que lleguen vivos al final de la gran tribulación.
SEPTIMO SELLO.- Apocalipsis 8:1-2: "Cuando abrió el séptimo sello, se hizo silencio en el cielo como por media hora. Y vi a los siete ángeles que estaban en pie ante Dios; y se les dieron siete trompetas".
Con la apertura de este séptimo sello, Dios esta anunciando siete plagas o juicios peores que los anteriores, de ahí el silencio en el cielo. Si los sellos hacen énfasis en los juicios sobre los seres humanos, las primeras cuatro trompetas lo hacen sobre la naturaleza y las últimas tres para castigar a todos los hombres del mundo que rechazan la salvación.

VENCIENDO A LOS GIGANTES

Nm 13,33
Vimos también a los gigantes, a los descendientes de Anac. A su lado nos sentíamos como langostas, y así nos miraban ellos también.


- EL GIGANTE DE LA DUDA.

- EL GIGANTE DEL MIEDO.

- EL GIGANTE DE LA DESESPERACION.

- EL GIGANTE DE LA FALTA DE FE.

En proceso...